- Velar por la seguridad de los menores será el eje principal de las labores preventivas y sancionatorias, a partir de este 17 de febrero.
- Casas de estudio priorizadas se ubican en rutas de alto tránsito vehicular.
- Labores a partir del jueves también incluyen controles de velocidad en zona escolar, vigilancia de estacionamiento indebido y de exceso de ocupantes de vehículos.
- Revisión de documentos al día en transporte de estudiantes también está dentro de los trabajos a ejecutar.
Por primera vez, desde el 2019, el curso lectivo en escuelas y colegios públicos, volverá a ser completamente presencial, de ahí el interés de la Policía de Tránsito en trabajar prioritariamente frente a 67 centros de estudio ubicados frente a rutas de alto riesgo, para reducir situaciones que puedan generar accidente en general y, en particular con los menores.
El aumento significativo, en consecuencia, de la cantidad de niños y jóvenes camino a sus lugares de estudio, ingresando y saliendo de ellos, obliga al
cuerpo policial a redoblar esfuerzos en busca de la prevención de fatalidades, a partir de este 17 de febrero.
“La prioridad serán 67 centros educativos, ya hemos establecido todo un plan de trabajo y horarios en sitios como frente a la escuela Brunca en Golfito, sobre la ruta nacional 14, o frente a la escuela Cristo Rey, sobre la ruta 4 en Sarapiquí, pero la idea es estar preparados para atender cualquier eventualidad en todo el país”, explicó Alberto Barquero Espinoza, sub director de la Policía de Tránsito.
Estas labores, que darán comienzo el próximo jueves y que se mantendrán indefinidamente, como se detalló, buscan prevenir accidentes, lo cual se logra con asistencia a padres y estudiantes en los ingresos a estos centros de estudio, pero también con labores de control, como lo es mediante radares de velocidad, para que se respete el límite máximo permitido, frente a zona escolar, con presencia de estudiantes (25 km/h).
De igual manera, apuntó Barquero, serán estrictos contra el estacionamiento indebido, que representa un peligro para los menores y genera congestionamientos. También se vigilará el exceso de ocupantes en los vehículos.
“Cuando llenamos de más el vehículo, estamos exponiendo a alguien o a varias personas a mayores lesiones o riesgos de muerte en caso de un accidente, porque no van con cinturón de seguridad ni con dispositivo de retención para menores, según el caso; entonces, más que un favor a un vecino, estamos propiciando una situación de mayor riesgo para esa persona”, detalló el funcionario.
Para quienes viajan en autobuses de ruta regular, la recomendación para los estudiantes es esperar la unidad en la acera, en la parada, no en la calle; esperar a que el bus esté completamente detenido y debidamente orillado, para subirse o bajarse.
Cruzar en las esquinas es otra recomendación para los menores que iniciarán el curso lectivo esta semana, así como levantarse con suficiente tiempo, para
que los eventuales congestionamientos viales no los haga cometer imprudencias como peatones a ellos o a sus padres, producto de la prisa.
El cuerpo policial también velará por la seguridad de los estudiantes, mediante la revisión de los permisos y revisiones generales de las busetas de estudiantes que los transportan al centro de estudio.
Otros centros educativos con vigilancia
La escuela Sinaí en Pérez Zeledón, sobre la ruta 244, la escuela Valvanero Vargas en Cieneguita, sobre la ruta 36, así como la escuela Jenaro Bonilla en el centro de Turrialba y la San Cristóbal sobre la ruta 1 en Cañas, son otros ejemplos de centros educativos en los que se aplicarán estas medidas citadas.
El Liceo de Nicoya sobre la ruta 150, el colegio Sión en Puntarenas frente a la ruta nacional 17, la escuela La Fortuna en San Carlos, la Escuela Villalobos en Lagunilla y la Metálica en San José son otros casos.