• Conductores con licencia por primera vez, pierden su derecho a conducir por un año, de manera inmediata.
Invadir el carril contrario en zona con línea continua demarcada que, por tanto, lo prohíbe, suma 287 boletas en los dos primeros meses del año, como la conducta con más sanciones de la lista de violaciones a la Ley de Tránsito, consideradas como más graves y de ahí que sean las de sanciones más fuertes.
Tomando en cuenta que la invasión de carril cobró la vida de 53 personas el año pasado, siendo la segunda causa de muerte, se confirma la gravedad de este tipo de maniobras ilegales.
Esta y otras faltas están contempladas en el artículo 143 de la Ley de Tránsito, implican la multa más alta (¢327.000) la acumulación de 6 puntos en la licencia y la obligatoriedad de llevar un curso de reeducación vial, ganarlo con, al menos, 80 para poder renovar y la licencia se le dará solo por 4 años y no por 6. Si el conductor tenía licencia por primera vez, además de todo lo anterior, pierde el derecho a conducir por un año, de manera automática, explicó el Sub director de la Policía de Tránsito, Alberto Barquero Espinoza.
En los dos primeros meses del año, agregó el funcionario, se detectaron 109 conductores con la licencia ya suspendida, 70 bajos los efectos del alcohol y 107 a más de 120 km/h.
Adelantar en curva, en una intersección o en puentes acumuló 134 boletas, mientras el peligroso giro en U, en zona prohibida, alcanzó las 231 boletas. Otras 15 personas recibieron la multa por negarse a realizar la prueba de alcohol, una sanción que se incorporó a la Ley de Tránsito en el año 2017.
Finalmente, 133 personas recibieron la multa porque sus vehículos excedían los límites permitidos de ruido o emisiones contaminantes. Sobre este tema, se considera peligroso por la afectación a la salud de las personas, sea por gases o por ruido excesivo, aclaró Barquero.
En total, fueron 1.086 multas tipo A (Artículo 143 de la Ley de Tránsito) las que se confeccionaron entre enero y febrero, para un promedio de 18 boletas al día.